Cómo descongelar más rápido la comida
Muchas veces, sobre todo cuando llegamos a casa cansados y no nos apetece cocinar, pensamos en los congelados, pero casi siempre hemos olvidado dejarlos en la nevera para que se descongelen unas horas antes, así que sacamos las espinacas (o lo que tengamos congelado) y prácticamente nos quedamos mirando y pensando “¡descongélate ya, venga!”
Cuando un alimento se congela, lo que verdaderamente se congela es el agua que coniene, en forma de pequeños cristales de hielo, que son los que hacen que el alimento esté duro, de forma que la descongelación consiste en fundir esos cristales de hielo para que vuelvan a su forma líquida.
Para fundir el hielo hay que aportar calor. Es difícil encontrar una fuente de calor de baja temperatura. La energía del calor viaja de una sustancia más templada a otra más fría, porque las moléculas más rápidas de la templada pueden chocarse contra las moléculas más frías y hacer que se muevan más deprisa.
Según esto, podríamos descongelar más rápidamente nuestros alimentos si los ponemos en contacto con el aire del horno caliente… pero también cocería las partes externas antes de que el interior pudiera calentarse y descongelarse. Así que el horno descartado.
El aire de la cocina tiene una temperatura más suave que la del horno, pero suficiente para descongelar. Eso sí, tarda mucho tiempo porque el aire es el peor conductor del calor (a pesar de que nos parezca lo contrario en verano y a pleno sol). Además, muchos alimentos, si los dejamos en la encimera sin más, pueden desarrollar bacterias muy rápidamente en las partes externas que se hayan descongelado. Dejarlo en la cocina, no recomendable.
El agua es mejor conductora que el aire porque sus moléculas están más juntas, así que podríamos sumergirlo en agua, pero cuidado, en una bolsa de cierre de cremallera para que el alimento no esté en contacto con el agua. Sumérgelo en un recipiente lleno de agua fría. Como el paquete congelado enfriará el agua, cámbiala cada media hora aproximadamente y así será más rápido. Aún con eso, ya sabemos que si es algo grande puede tardar horas.
El método más rápido es poner el alimento sobre una sartén o cacerola fría.
Los metales son los materiales con mayor conductividad del calor porque tienen muchísimos electrones sueltos que pueden transmitir energía mucho mejor. Los utensilios de hierro conducen muy bien el calor de la cocina al interior de la comida congelada, y los alimentos que pongas se descongelarán mucho más rápido que con otros métodos.
Cuanto más grueso sea el recipiente, mejor. El metal grueso transmite más calor por minuto. Los alimentos planos se descongelan antes porque tienen mayor superficie en contacto con el recipiente. Tenlo en cuenta cuando prepares la comida para congelar.
Las sartenes antiadherentes son peores conductoras, y las de hierro fundido no son recomendables porque es poroso.
Los “descongeladores mágicos” que venden en los teletienda no son más que placas con aluminio normal y corriente que funcionan exactamente igual que la sartén y por las mismas razones.

Chef vegana, investigando la gastronomía vegana y todas sus posibilidades. En CreatiVegan.net subo recetas. En GastronomiaVegana.org subo tutoriales y artículos sobre ingredientes y procesos.